viernes, 23 de marzo de 2012

Mutación 1 _Ciudad-pantano_




Las ciudades y sus habitantes van generando en su convivencia, mutaciones. 

Así como hay personas, hay anfibios y a veces hay personas-anfibias, no confundir con ambiguas que son obviamente otras.

Estos seres nacen de la ciudad-pantano, una ciudad tipo que se fue llenando de gente, con la gente de caos, con el caos de mugre y así se fue estancando, empantanando. Sufrió esa metamorfosis de pueblo a ciudad espontánea, caótica y no planeada.

Es en este contexto que surgen las personas-anfibias, una mutación necesaria del ser humano, quizá podríamos enumerar culpables, pero al final necesitamos que alguien “croe” en el pantano. No todos tenemos esa habilidad, no todos sabemos croar, entonces son necesarias.

Ahí es donde sucede, cuando la rutina del día a día nos hace olvidar  que estamos en el pantano, simplemente no pensamos, ni vemos, ni olemos. Somos un “copy-paste” de vaya saber quién.

Primero croa uno anunciando despacio que empezó, y lo ignoramos, luego croan más, aun así todavía podemos caminar.  Entonces se hace insoportable, cuando uno empieza le siguen todos, el croar crece hasta ser un murmullo ensordecedor. Hasta sentir que te estallan los tímpanos y gritas ¡BASTA!

 El croar no cesa, pero no molesta, me han cambiado, eh mutado. En este caos rutinario de ciudad-pantano hay personas mudas y anfibios croando.

No hay comentarios:

Publicar un comentario